Los neumáticos también envejecen
Los neumáticos son uno de los elementos cruciales para la seguridad de nuestros vehículos. Es por ello que en varias ocasiones hemos reiterado la necesidad de revisar su estado, prestando atención al correcto mantenimiento de los mismos. A fin de cuentas, se trata del único elemento de nuestros coches que está en contacto directo con la carretera, por lo que si no se encuentra en óptimas condiciones podemos perder adherencia.
El frío, la lluvia y las hojas son algunos de los elementos propios del otoño que pueden causar problemas en la conexión de las ruedas y la carretera, es por ello que tanto la presión como su estado va a ser determinante para evitar problemas como el aquaplaning. Los dibujos del neumático pueden ayudarnos a determinar su estado, de manera que si se encuentran demasiado desgastados deberemos cambiarlos por unos nuevos. Del mismo modo si notamos un desgaste irregular, es decir, que el centro está más desgastado que los laterales o viceversa, sabremos que la presión no es la correcta.
Como hemos visto el desgaste de los neumáticos es sencillo de determinar. Pero, ¿qué ocurre cuando una rueda es antigua pero no está desgastada? los neumáticos no tienen fecha de caducidad, sin embargo si envejecen a pesar de que se encuentren en desuso. Es recomendable que una vez los neumáticos tienen 5 años estos sean revisados con mayor periodicidad y que sean sustituidos una vez han pasado 10 años de la fecha de fabricación, la cual podemos consultarla en el dorso de la rueda.