¿Qué es la culata del motor de un coche y para qué sirve?
La culata es una de las partes esenciales de un coche porque actúa como soporte de muchas otras piezas y componentes. Concretamente, la culata es un bloque, generalmente fabricado en hierro fundido o aleación de aluminio, colocado en la parte superior de los cilindros. Su función es evitar que se produzcan pérdidas de compresión.
La culata del motor se fabrica normalmente con hierro fundido o aleación de aluminio, materiales con los que se consigue un equilibrio entre un gran nivel de resistencia y rigidez con buena conductividad térmica. De esta forma, permite liberar el calor en la cámara de combustión y eleva la relación de compresión, mejorando así el rendimiento del coche.
Existen diferencias entre una culata de aleación de aluminio y otra de hierro fundido. La primera permite conducir mejor el calor y son mucho más ligeras, pero su capacidad de resistencia a la fricción de los pistones es inferior que en las de hierro fundido. Por ese motivo, muchas veces están revestidas de acero y son también más caras.
La culata va unida al motor del coche mediante unos tornillos y una junta de culata que se encarga de sellar correctamente ambas piezas para soportar las altas temperaturas que alcanza el motor y evitar fugas de compresión. La culata de un motor es mucho más que una tapa para los cilindros o una pieza que cierra el bloque motor. es el elemento más importante y complejo del coche, ya que sirve de asentamiento de otros componentes del motor importantes que pueden afectar seriamente a la estructura principal del motor, en caso de desgaste.
Entre las principales funciones de una culata del motor, podemos señalar la de alojar el cigüeñal, bielas, pistones y conexiones de elementos que se accionan con el movimiento del cigüeñal, como la bomba del agua, aceite y combustible. Así mismo, la válvula de admisión y escape, el árbol de levas, en el caso de motores tipo OHV, donde el eje de levas está montado fuera, y orificios para las bujías, en el caso de ser un motor de gasolina, y para los inyectores y precámara de combustión, si es un motor diésel.
Del mismo modo, la culata alberga también los conductos de refrigeración en aquellos motores con refrigeración líquida. Estos motores tienen oquedades para que circule el agua y otras zonas para el aceite.