El catalizador es un dispositivo ubicado entre el motor y el tubo de escape cuya misión es reducir los gases contaminante que expulsa el coche. Las altas temperaturas que alcanza en esta zona le permiten realizar este proceso.
Para poder desempeñar su función el catalizador tiene que alcanzar entorno a unos 700º C su proceso dura menos de una décima de segunda, tiempo en el cual transforma gases contaminantes como pueden ser como el óxido de carbono, el monóxido de carbono y otros residuos de combustible no quemado en sustancias inocuas como oxígeno o vapor de agua.